La Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), emitió un comunicado en el que preguntan “¿Por qué no nos dejan trabajar”? y advierten que están “condenados a la ruina”.
El titular de esa entidad, Daniel Ariosto, habló con el Post y dijo que “hace tiempo que venimos pidiendo al gobierno nacional que, así como hay un comité asesor en lo sanitario, haya uno en lo económico formado por especialistas, instituciones y empresarios que entiendan de comercio, porque no somos escuchados”.
Consultado respecto a si los legisladores por Mendoza han recibido este reclamo, Ariosto subrayó que “Salvo Cornejo, en el resto de los senadores y diputados observamos un silencio de radio absoluto, no sé si es para no contradecir, o si es porque le cortan los víveres al que habla un poquito de más.”
En ese sentido, precisó que los reclamos son dirigidos al gobierno nacional, porque “Suarez tiene las mejores intenciones pero los gobernadores en general llegan hasta ahí, no tienen mucho margen de acción”.
“El país está marchando para atrás aceleradamente y se están destruyendo miles de empleos”, recordó el hotelero. Y advirtió sobre “situaciones entre comerciantes que no están autorizados pero abren igual y se producen alteraciones con la policía pero ellos ruegan trabajar porque no les queda otra”.
¿Y los créditos?
Consultado respecto a los créditos de los bancos para que las Pymes pudieran afrontar los sueldos de marzo, Ariosto expreso: es lamentable lo que los bancos están haciendo, no cumplen con el espíritu para el que fueron creados, que es ser un factor de ayuda. Apenas liquidaron en préstamos el 13% y con condiciones que no sirven, ofrecen dinero a 90 días y nosotros (del sector hotelero y turísitco) en ese tiempo vamos a seguir cerrados y sin facturar. ”
Respecto a una “rebelión fiscal” como están planteando algunos comerciantes en las redes, Ariosto dijo que “pagara impuestos el que tenga espaldas, pero el que no, se fundirá y obviamente ya no podemos hablar de una rebelión sino de un impedimento. Ahora hay actividades como las farmacias o los supermercados que la están levantando en pala. Otros chicos, como los almacenes o verdulerías y carnicerías de barrio, que no pagan un impuesto y nunca los van a pagar porque nunca se los persiguió”.
“Nos escriben comerciantes como un zapatero que me pregunta por qué un ferretero puede abrir y él no. Y no hay explicación para eso.”
“Pero acá se habla de los pobres, de los marginados, del impuesto a los ricos, y se esta tiñendo la política para un lado que parece olvidar que las empresas son las que generan recursos genuinos y están recibiendo misiles. Nosotros sabemos subsistir con híper inflación, pero con los negocios cerrados, no.”
Fuente: MendozaPost
30/04/2020