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Francis Mallmann: «Decidimos cerrar hasta que las cosas mejoren»

El chef internacional Francis Mallmann confirmó esta mañana que mantendrá cerrado su restaurante «1884», en la Bodega Escorihuela, de Godoy Cruz, hasta «que las cosas mejoren» o hasta que «vuelva el turismo», en por lo menos un año, explicó. «Intentamos hacer delivery pero realmente no ayuda a pagar los costos» dijo en el programa Rumbo Directo esta mañana, por Radio Nihuil, con los periodistas Carlos Hernández y Roxana Badaloni.

El jueves, Mendoza Post informó sobre el eventual cierre de «1884» y «María Antonieta», este último el bistró de Vanina Chimeno, esposa de Mallmann. Y que Mallmann seguiría adelante con sus otros emprendimientos en Mendoza, como la pizzería gourmet Orégano, y Ramos Generales, en la bodega Kaikén. Tampoco cerrará Siete Fuegos en The Vines, aunque éste último pertenece al hotel en sí y Mallmann aporta el know how y está a cargo de la cocina.

«La verdad es que la situación es muy difícil» empezó diciendo Mallmann, con el mundo gastronómico y turístico de Mendoza sacudido por la noticia de su posible cierre. «El contexto es difícil. 1884 tiene 22 o 23 años de trayectoria, y hemos decidido momentáneamente cerrarlo para esperar a que venga el turismo. El 95 % de nuestra clientela es turística. Intentamos a hacer delivery pero no funcionó, no ayuda a pagar los costos. Por eso decidimos cerrar hasta que las cosas mejoren» confirmó. Y luego dijo que a causa de la pandemia, pasará por lo menos un año hasta que regrese el turismo.

Mallmann, un referente mundial y gran embajador de las bonanzas turísticas de Mendoza, habló de la provincia. «Soy muy optimista por el futuro de Mendoza. Es el destino turístico más importante del país. Creo que el vino y las bodegas han hecho un trabajo increíble apoyando al turismo… la geografía de Mendoza, que deja a la gente sin habla… y apoyado por los gobiernos que en los últimos 25 o 30 años han hecho que Mendoza sea el destino que es hoy…» reflexionó.

Kaikén, abrimos poco antes de la pandemia… cerramos y ahora volvimos a abrir. Trabajamos los sábados y domingos… muy bien. Orégano está abierto para todo, hay un almacencito para que la gente pueda llevar harinas orgánicas, vinos… Se sirve desde el desayuno en adelante… Y María Antonieta está muy complicado, un poco como nosotros. Necesita mucha gente para poder operar, y necesita del turismo».

Cuando le preguntaron si el cierre era definitivo, dijo que «la idea es volver». Y explicó que «…estamos haciendo un cierre prolijo… nadie sabe cuándo va a mejorar la situación… mi sensación es que por lo menos tenemos un año de espera hasta que vuelva el turismo, con la furia del virus, sobre todo en Brasil. Es muy difícil que el gobierno nacional permita el ingreso de extranjeros. Todos soñamos con que aparezca una vacuna… pero son sueños… la decisión responsable es cerrar y esperar… y llegar a un horizonte mejor…»

También habló Mallmann de sus emprendimientos en el mundo en medio de la pandemia. «Tengo once restaurantes cerrados. Tuvimos todos cerrados en algún momento. Abrimos Francia, Miami hace dos semanas… estamos operando en una sociedad que crece en infectados día a día…» dijo. «Es un momento muy difícil, muy triste para las familias, para las empresas, para las personas…» y luego dijo que la pandemia, con la cantidad de muertos y enfermos, podría significar un cambio profundo en la humanidad, que traiga algo mejor para todo el planeta.

Respecto de Mendoza, dijo que la provincia «está bien» desde el punto de vista del turismo, y que el vino era «el mejor embajador…» Terminó la entrevista diciendo «No quiero hablar más, esto es muy triste para todos» y pidió a la prensa que «tomen estas declaraciones» porque «nos han estado llamando mucho». Y que se pueden reproducirse completas aquí.

Fuente: Mendoza Post
30/06/2020