La laguna de Llancanelo se ubica en Malargüe. En toda la reserva existen más de 150 especies animales. Aunque, a veces, no se muestran.
Desde el punto de vista científico, la Laguna de Llancanelo es una Reserva Natural ideal. Permite estudiar con tranquilidad y detenimiento a la enorme variedad de especies animales y vegetales que conviven en ella. Sin embargo, desde el punto de vista turístico, las experiencias son dispares. Algunas personas han regresado anonadadas por el paisaje, el agua y los animales que se avistan. Sin embargo, otras tantas, han regresado anonadadas por la poca agua y el par de flamencos que han podido contemplar.
La laguna de Llancanelo
La Laguna de Llancanelo es una reserva natural situada al sur de la Provincia de Mendoza. A sólo 75 kilómetros de la ciudad de Malargüe se encuentra este paisaje inolvidable, este humedal de 65000 ha. ubicado a 1300 msm. Sus aguas son saladas y se alimenta principalmente del río homónimo, como así también de los arroyos Carilauquen, Carapacho, los Menucos, Mocho y Malo, y de un importante flujo de aguas subterráneas.
En medio de un paisaje semidesértico, esta enorme oasis se ha transformado en albergue de la mayor cantidad de avifauna de Sudamérica, muchas de ellas son migratorias, como los flamencos, y eligen este ambiente para anidar. También conviven una gran biodiversidad de especies mamíferas y comunidades vegetales.
Por su importante valor ecológico, desde 1980 es reserva provincial, y la comunidad ambientalista internacional además la ha declarado sitio RAMSAR. Esto es que, a nivel internacional, la laguna debe ser cuidada y estudiada por su enorme variedad de especies.
LLancanelo, que significa “perla color verde azulada”, es el lugar indicado para avistar gran variedad de aves (hay 155 especies censadas), sacar muchas fotos, disfrutar de la belleza de la naturaleza, la tranquilidad del paisaje y un inolvidable atardecer. Además, si las condiciones climáticas lo permiten, y el camino está habilitado, se visita el Volcán Trapal. Éste puede ser escalado y, después de una ascensión de unos 60 minutos, se llega a un lugar desde donde se obtiene una impresionante vista panorámica de la Reserva.
La zona está formada por vegas, bañados, ciénagas y una límpida laguna de aguas saladas, constituyendo un humedal de vital importancia para las especies que migran hacia algún punto intermedio a lo largo del trayecto Alaska-Tierra del Fuego.
Atrayendo a los apasionados por los avistajes y safaris fotográficos, la laguna brinda el espectáculo natural de contemplar los coloridos flamencos, cisnes de cuello negro, gallaretas y garzas.
Un lugar paradisíaco que puede visitarse todo el año.
Una de las mayores amenazas que enfrenta el área protegida es la disminución de la masa hídrica, lo que produce una visible retracción de la laguna y el humedal. Esto es producto de la escasez de precipitaciones y de la disminución del caudal del río Malargüe, cuyas aguas provienen del deshielo de las cumbres andinas.
Tierra petrolera
La región de la laguna de Llancanelo cubre un yacimiento petrolífero conocido desde las primeras décadas del siglo XX dentro de la denominada Cuenca Cuyana. Si bien de modo explícito la normativa ambiental de la provincia impide la explotación de hidrocarburos en el interior de las áreas protegidas, diversas circunstancias, entre ellas la falta o inexactitud en la definición de los límites, han ocasionado conflictos y controversias a lo largo del tiempo que, en algunos casos, llegaron a las más altas instancias judiciales. Paralelamente, existen iniciativas que buscan desarrollar metodologías que permitan la actividad extractiva minimizando el riesgo de impacto ambiental.
Fuente: SerArgentino.com por Exequiel Nacevich