De acuerdo a un estudio elaborado para la Faevyt, la utilidad neta –libre de impuestos- sobre el volumen de operaciones de las agencias es del 1% en promedio. El avance de la incidencia iscal sobre los márgenes de la intermediación llega hasta el 48%. Desde la entidad sostienen que es imperioso buscar revertir la situación y pusieron como ejemplo a imitar la exención del IVA al extranjero sobre los paquetes adoptada la semana pasada en Colombia.
La batalla por la subsistencia de las agencias de viajes atraviesa en Argentina uno de sus peores momentos. La rentabilidad soporta con dificultades un movimiento de pinza que ha llevado a la dirigencia sectorial a plantear la inviabilidad comercial del negocio tradicional. Por un lado, han caído los términos de retribución por la intermediación. El caso más evidente es el de la distribución del producto aéreo, que a partir de las bajas de las comisiones “se ha vuelto antieconómico”, según las autoridades de la Faevyt.
Por el otro, la incidencia de los costos sobre las estructuras ha ido avanzando sin prisa pero sin pausa sobre los márgenes de las empresas.
“La utilidad neta –libre de impuestos– sobre el volumen de operaciones es del 1% en promedio. Cuando lo normal en una temporada buena oscilaba en torno al 3%”, explicó Pascual Barbieri, asesor económico y fiscal de la Faevyt, quien argumentó: “El tema es que la incidencia fiscal –tanto directa como indirecta– y las cargas sociales han ido subiendo permanentemente en los últimos años, al mismo tiempo que fueron bajando las comisiones en un negocio con tendencia a la concentración”.
Barbieri, a pedido de la Faevyt, elaboró un estudio sobre el impacto de los costos fiscales en las agencias de viajes, la cual ubicó en un 48% sobre el margen de las empresas. Incluso, el experto aclaró que “a menor volumen operado la incidencia es mayor”. Con lo cual, el promedio no se ajusta a los grandes jugadores del mercado (con más aire para afrontar lo que viene), pero también esconde casos de pequeñas agencias donde la rentabilidad llega incluso a ser negativa.
“Por eso digo que el problema es estructural y nos tenemos que sentar a ver cómo podemos revertir la situación”, apuntó el titular de la Federación, Fabricio Di Giambattista. En ese sentido, el dirigente aplaudió la decisión del martes pasado del gobierno de Colombia de decretar la exención del IVA para turistas extranjeros que compren sus paquetes a través de agencias.
LOS NÚMEROS.
De acuerdo al estudio elaborado por Barbieri para la Faevyt, el costo fiscal total sobre el margen de la agencia es del 48% (aunque neto del IVA la incidencia se reduce al 25%). Si a eso se le suma el gasto en estructura (casi un 40% en salarios), comunicación, publicidad y marketing, la utilidad neta araña el 1% sobre el total del volumen operado
Ahora bien, cómo se traduce ese cálculo en términos absolutos. El informe parte de una facturación neta del IVA de $ 100, sobre la que estima un margen promedio de $ 15 (manejando un escenario optimista, ya que la comisión por la intermediación es muy variable de acuerdo al producto). De esos $ 15 que recibe de retribución la agencia, $ 7,23 se van en impuestos de la siguiente forma: $ 3,15 del IVA, $ 1,73 de aportes y contribuciones, $ 1,12 de impuesto al cheque, $ 0,9 de Ingresos Brutos y $ 0,33 del IVA no recuperado. O sea, de ese margen $ 7,23 se van en tributos ($ 4,08 si se considera que el IVA lo abona el cliente).
En esa cuenta no seincluyen el impuesto a las ganancias sobre la utilidad neta, ni las retenciones y percepciones en exceso que generan un costo fiscal añadido (por la falta de reconocimiento de las agencias como intermediarios muchas veces los fiscos generan saldos a favor cuyo recupero para las empresas es un problema aparte). Estos asteriscos distan de ser notas al margen, ya que sumados ambos pueden llegar a representar una carga de casi la mitad de esa rentabilidad final del 1%.
De los $ 7,77 restantes del margen (una vez descontada la incidencia fiscal), otros $ 5,77 se van en salarios. Y, según el estudio, $ 4,15 se invierten en estructura (oficinas, equipamiento y software, entre otros), comunicación, publicidad y marketing. La cuenta arrojaría así un saldo negativo de $ 2,15, pero –como explicó Barbieri– si consideramos que el IVA no forma parte del costo fiscal sobre el margen, la utilidad neta por cada $ 15 es de $ 1.
“Con una estructura de costos semejante es difícil encontrar espacios para invertir y se corren demasiados riesgos”, concluyó Di Giambattista.
Fuente: Ladevi
03/03/2016