Mendoza es una opción ideal para quienes buscan originalidad y elegancia en su fiesta de bodas, pues los establecimientos vinícolas combinan gastronomía, y vinos de alta gama con las comodidades y distinguida arquitectura del interior –donde el festejo cuenta con un inusual entorno de barricas y tanques– o el paisajismo de vanguardia, con que han sido concebidos sus amplios jardines.