Junto al Edificio Gómez, este emblemático edificio de 1926, se ha convertido en símbolo del perfil urbano del microcentro mendocino, ya que se encuentra en la esquina de San Martín y la peatonal Sarmiento, considerada el “kilómetro cero” de la ciudad. Nos ofrece su espléndida concepción arquitectónica y sus asombrosos vitrales,
piezas de incalculable valor por su factura en los hornos de carbón de un taller en Francia, antigua artesanía, hoy desaparecida. Posee 4 plantas y una torre de 7 pisos coronada por una cúpula. Su estilo combina distintos movimientos arquitectónicos europeos, aunque se destaca una clara impronta francesa con detalles modernistas,
principalmente en sus balcones.
La planta baja, reservada exclusivamente para locales comerciales, tiene acceso por tres calles: San Martín, Sarmiento y 9 de Julio. Los pisos superiores están destinados a oficinas y viviendas.