Los atardeceres se imponen en el verano. Actividad enoturística que deleita con una propuesta integral: vinos, paisajes naturales y más…
Los sunsets de bodegas son un clásico. Con el inicio de la primavera en Mendoza, empiezan a asomar estos programas que forman parte de las actividades enoturísticas de las bodegas locales. Lo interesante, para turistas y mendocinos, es que muchas casas vitivinícolas deciden extenderlos durante todo el verano.
La cantidad de personas que visitan la provincia durante los meses más cálidos, las altas temperaturas que invitan a buscar alternativas al aire libre y el comienzo de año son motivos perfectos para que los atardeceres entre viñedos se conviertan en un must para disfrutar y deleitarse con buenos vinos y paisajes naturales de montaña y viñedos, junto a una propuesta gastronómica y artística que siempre gusta.
A continuación, dos propuestas para agendar.
- El primer atardecer del año en Andeluna
Es un clásico del 1 de enero. Bodega Andeluna y Bus Vitivinícola realizan una gran experiencia enoturística: el primer atardecer 2020 en Valle de Uco, con el plus del traslado en el bus vitivinícola para disfrutar a pleno el cóctel maridado con vinos de la bodega en los jardines que dan a los viñedos y con vista a la cordillera.
La intervención del Bus Vitivinícola en este plan tiene que ver con la apuesta al programa de consumo responsable de vino, Wine in Moderation.
El catering, a cargo de la chef Graciela Hisa, contempla exquisiteces saladas y dulces con ingredientes regionales y de estación que maridarán con dos líneas clásicas de la bodega de Valle de Uco: Andeluna 1300 y Andeluna Altitud que son el reflejo del suelo y tierra.
- Puesta del sol en la tradicional bodega de Maipú.
Atardecer con visita guiada y degustación de aceites en López
Otro programa para tener en cuenta durante enero y que tiene al atardecer como protagonista, es el que ofrece Bodegas López, en Maipú.
Sin vista a la cordillera, pero con un jardín espectacular vecino a la bodega, la tradicional casa maipucina abre sus puertas el 10 de enero para un atardecer que incluye visita guiada por la bodega, degustación de aceites de oliva con una selección de quesos y panes artesanales y maridaje con los vinos.
Además, habrá una estación con panes, fiambres y vegetales y otra de postres. Todo, acompañado de Casona López Malbec y López Dulce Natural. Antes de despedirse, los asistentes podrán disfrutar un cóctel a base de los espumantes de la casa.
Fuente: Guarda 14, por Florencia Da Souza