Atractivos de Malargüe
Malargüe, donde un paisaje supera al otro, y así sucesivamente. Aquí, la crónica del viaje que hoy mismo podés hacer, debido a la cercanía por la nueva conexión de la Ruta 40 en el desvío por Pareditas.
Este departamento del sur mendocino posee una gran cantidad de atractivos y acá te contamos los pasos a seguir para no perderse las principales atracciones.
Para acceder a este bello departamento, ubicado al sur de la Provincia de Mendoza, tenemos que trasladarnos por ruta 40, con sentido hacia el sur, si nos encontramos en la ciudad de Mendoza. Nos separan 320 kilómetros. Pasamos por los departamentos del Valle de Uco, y tras alcanzar la localidad de Pareditas, tomamos la bifurcación hacia el oeste, allí comenzamos el nuevo tramo de la ruta 40, que se encuentra en excelentes condiciones.
Desde el departamento de San Rafael son 188 kilómetros por RN 144 y luego RN 40 desde la localidad de El Sosneado.
Desde la provincia de Neuquén por RN 40, son 596 kilómetros de distancia.
¿Qué visitar en Malargüe?
Si bien recorrer sus atractivos nos llevaría varios días, te dejamos algunas propuestas para una escapada de fin de semana.
Nuestro recorrido lo realizamos desde la ciudad de Mendoza, salimos a las 8 de la mañana, aproximadamente. Y llegamos a la localidad de Malargüe al medio día, luego de dos paradas técnicas, una en el distrito de Eugenio Bustos, dentro del departamento de San Carlos, donde necesitábamos cargar combustible. Y la otra sobre un tramo de ruta 40, donde hay unos hermosos miradores que dejan ver el bello paisaje en este tramo del camino, el cual está como lo indicamos más arriba, en excelentes condiciones.
Castillos de Pincheira
Una vez alojados, en nuestro caso en cabañas AMALAR, nos dirigimos a 27 kilómetros hacia el oeste, por camino consolidado (transitable) a almorzar a Castillos de Pincheira. Aquí las opciones son pasar el día en el camping o almorzar un plato típico de chivo malargüino en el restaurante Altos Sauces, que se encuentra dentro del mismo predio.
Aquellos que les gusta disfrutar de la naturaleza, es un excelente lugar para realizar senderismo, atravesando el río Malargüe, a través de un puente colgante, se puede llegar hasta la formación rocosa compuesta por un conjunto sedimentario y volcánico que alcanza los 2163 msnm, en el cerro algodón. Que lleva el nombre de “Castillos de Pincheira” recibió este nombre, ya que el lugar era utilizado por una banda de cuatreros que lideraban los hermanos chilenos, para ocultarse en sus cuevas y facilitar el tráfico de ganado entre Argentina y Chile.
Por la tarde se puede realizar una visita al planetario en la ciudad de Malargüe, lugar ideal para adultos y niños.
Laguna de la Niña Encantada
Al siguiente día, luego del desayuno, partimos por ruta 40 hacia el norte, hasta alcanzar el cruce con la ruta provincial 222, con rumbo hacia el centro de ski Las Leñas. Luego de recorrer 40 kilómetros desde nuestro punto de partida, pudimos acceder a la Laguna de la Niña Encantada. A escasos metros del río Salado se encuentra este espejo de inigualable belleza, para acceder al mismo hay que pagar una entrada en el puesto de guardaparque, tiene un costo de $90 por persona (adulto) y $60 (menores) tarifa diciembre del 2020. Se puede recorrer su borde, por un sendero señalizado. Enclavada a los pies del escorial volcánico de El Infiernillo, un increíble campo de rocas volcánicas, circundan sus paredes, que al reflejarse en el agua producen formaciones diversas, que han dado origen a innumerables leyendas, entre ellas a la que deviene en su nombre.
Pozo de las Ánimas
Luego continuando por la ruta 222, pasamos el Valle de los Molles, lugar con facilidades donde nos podemos detener a tomar un descanso, y a 58 kilómetros de Malargüe, encontramos El Pozo de Las Ánimas. Dos depresiones conocidas como dolinas, originada por la disolución de los depósitos subterráneos de rocas como el yeso, por efecto de las filtraciones de las capas freáticas subterráneas, producen hundimientos y derrumbes del terreno, conformando grandes pozos de forma cónica y circular. El viento permanente que sopla en el lugar es la causa del aullido, que según la leyenda corresponde a las voces de almas en pena.
Si continuamos la ruta, a 20 kilómetros llegaremos al Valle Las Leñas, donde en invierno es centro de atracción para quienes disfrutan de las actividades de nieve, pero este sitio también lo podemos disfrutar en verano. Hay restaurantes y se pueden realizar actividades de senderismo, trekking, cabalgatas. Nosotros en esta oportunidad no lo visitamos. Ya que por la tarde teníamos previsto visitar la cascada de Manqui Malal.
Cascada Manquí Malal
Partimos de la ciudad de Malargüe, por ruta 40 a 32 kilómetros, antes de la Cuesta del Chihuido, se encuentra el parador de Tucara, está bien señalizado, donde se paga la entrada de ingreso para poder acceder al predio, el costo es de $ 250 (adulto – diciembre 2020). Vamos con un guía de sitio que nos acompaña durante el recorrido y nos muestra las bellezas del lugar.
Es un verdadero museo al aire libre, donde podremos observar los estratos que conforman las paredes de origen marino, que fueron elevados por la orogenia andina. Es posible admirar los numerosos fósiles de fauna marina del periodo jurásico, ostras y caracoles petrificados de gran tamaño, como el amonite. También cuenta con dos cascadas, una de ellas de unos 30 metros de alto. Alimentada por agua de vertiente. “Manqui (condor) Malal (barda)”.
Fuente: Memo por Viajeros Comunes