Atravesado por la RN 40, esta comarca cordillerana tiene encantos poco vistos, te decimos por qué la eligen los extranjeros.
La Ruta 40 atraviesa el Valle de Uco, una microrregión conformada por los departamentos de Tupungato, San Carlos y Tunuyán. Sus inimaginables paisajes, se encuadran entre el Cordón del Plata y el Portillo y están coronados por el cerro Tupungato. A través del increíble camino de los Cerrillos en Tupungato se accede al llamado mirador del Cristo Rey, donde hay una vista majestuosa del valle de Tupungato con la cordillera de Los Andes como marco imponente. El Cristo Rey se puede visitar en época estival de lunes a domingo de 8 a 20 con entrada gratis. El Cordón del Plata entre las vegas del Alto de Las Carreras fue morada de históricas estancias jesuíticas ganaderas. En la actualidad es una zona donde se produce cebada, papa y alfalfa, y se integra al denominado circuito del Valle de Potrerillos (Luján de Cuyo). En este tramo se encuentran el Chateau de Ancón, elegante castillo estilo europeo en medio de frutales y viñedos. También el poblado de San José con su antigua capilla. La imponente Quebrada del Cóndor es uno de los lugares más impactantes para disfrutar a pleno una cabalgata y observar el vuelo de esta hermosa ave.
Atractivos históricos
Un imperdible en la región es el Manzano Histórico, al pie del Cordón del Portillo, escenario de una de las históricas rutas del Ejército de los Andes. También se distingue el Monumento Retorno a la Patria, que rememora el reposo del General San Martín a su regreso a suelo argentino. Complementan este sitio la zona de campings, estación piscícola, centro de interpretación y un Vía Crucis.
Turismo rural
El turismo rural está presente en toda la zona y tiene como exponentes a circuitos destacados como Caminos de Altamira, Manos de Jaurúa o la Vieja Ruta 40. Trasladarse por ellos es viajar al pasado en contacto con su gente, tradiciones, costumbres, calles típicas, bares y cines antiguos, o centenarias casas de campo con sus gruesas paredes de adobe. Los senderos arbóreos son ideales para recorrerlos en bicicleta, sulky o en atractivas caminatas. El intercambio de vivencias entre visitantes y habitantes locales fusiona actividades de campo, artesanías y cocina campestre casera.
Por los caminos del vino
El Camino del Vino es un seductor recorrido que enlaza reconocidos vinos de alta gama, con gastronomía gourmet, alojamientos temáticos y emprendimientos artesanales. Los singulares “terroirs” de la zona otorgan a los vinos mayor complejidad y estructura. En San Carlos, los suelos calcáreos, con una altitud de más de 1.000 msnm, el riego con agua pura de deshielo y una marcada amplitud térmica, conceden a los viñedos la más alta calidad, lo que se evidencia en la excelencia de sus vinos. La mayoría de las bodegas, ahí radicadas, son renombre internacional y son las elegidas por los visitantes para disfrutar de vinos de alta gama en medio de paisajes de montañas y viñedos de gran hermosura. Destaca también la producción de excelentes sidras, jugos y conservas.
San Carlos
San Carlos es el departamento más antiguo de la Provincia de Mendoza, se conformó en 1772. Posee con una gran patrimonio histórico, cultural, arqueológico y paisajístico. Entre sus propuestas destacan las actividades deportivas y recreativas como trekking, cabalgatas, rafting, mountain bike, escaladas, safari fotográfico y pesca deportiva, entre otras, además de espacios para el relax y el descanso armónico. Su casco histórico, se ubica en la Villa Cabecera Departamental. En él se conservan las ruinas del antiguo Fuerte San Carlos, construido en 1770 y hoy Monumento Histórico Nacional. Junto a ellas se halla el Museo Regional Municipal Fuerte San Carlos, que reúne elementos de las luchas entre nativos y conquistadores, la gesta Sanmartiniana, los procesos de evangelización y el trabajo de criollos e inmigrantes. En el río Tunuyán pueden realizarse actividades como rafting, kayak o doky en escenarios imperdibles.
Vieja Ruta 40
San Carlos es uno de los pocos sitios del país donde aún se conserva gran parte de la traza original de la mítica Ruta Nacional 40. Su esencia, donde la integración entre esos paisajes imponentes y un camino histórico se realza y potencia continuamente, amalgama una verdadera Ruta Escénica. Recorrer este camino es reconstruir parte de la historia argentina y de la fundación de los pueblos sancarlinos. Desde el antiguo puente sobre el río Tunuyán hasta el Paraje de La Jaula, junto al río Diamante, la ruta muestra sus tesoros ocultos.
Las Huayquearías
El desierto de las Huayquerías posee un paisaje casi inexplorado, lo que lo transforma en un sitio ideal para los enamorados de la aventura. Su nombre proviene del vocablo Huayco que significa cauce o arroyo seco. Sobre un relieve volcánico, con encaramadas paredes y ríos que ya no están, por caminos serpenteantes se accede al cañadón de la Salada, una garganta de tierra arcillosa que brinda un viaje extraordinario por las extrañas figuras esculpidas por el viento. Quien lo visita puede practicar trekking, rappel, cuerdas o actividades de relax y contemplativas.
Laguna del Diamante
A 130 kilómetros de la Villa de San Carlos está la Reserva Natural Protegida Laguna del Diamante. Es un espejo de aguas cristalinas a 3.300 msnm, asentado sobre una antigua caldera volcánica al pie del Maipo. Este volcán se refleja en la laguna con la forma de un diamante, dando así nombre a la reserva. El lugar es ideal para el turismo activo, con opciones como trekking, mountain bike, ascensos al Maipo, avistaje de flora y fauna, safaris fotográficos y pesca deportiva.
Fuente: Serargentino.com por Exequiel Nacevich