El Parque General San Martín fue diseñado en 1896 por el paisajista Carlos Thays. Su orbe vegetal de 350 hectáreas fue creado en base a un criterio de calidad de vida, ya que la forestación del lado oeste de la ciudad permite la justa humidificación del ambiente.
Sus portones fueron encargados en los primeros años del siglo XX por el Sultán Rojo de Turquía a una fundición escocesa. Tras su derrocamiento, los majestuosos portones quedaron sin dueño y fueron comprados, en 1907, por el Gobierno de Mendoza para enmarcar el acceso al Parque San Martín. (Av. Emilio Civit y Boulogne Sur Mer).